sábado, 8 de mayo de 2010

Pedí un deseo





A veces extraño mi sonrisa de aquella época
en la que nada era imposible,
nada me dolía,
a nada le temía,
y el corazón lo creía todo.



Regresa, pequeña.


2 comentarios:

marianocomecarnenipollonipez dijo...

voltea a ver tus rodillas...

siguen con tierra...

todo lo que eres es gracias a esa niña!

tip. déjate caer boca abajo de el pasamanos... yo así me acuerdo mucho de cuando era muy chiquita!

p.s. igual un día nos vamos a pasear al parque juntas!

gabilalara dijo...

Yo llevo algunos trucos y boberías lindas que me transforman, pero te entiendo Mayi, te entiendo.